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lunes, 22 de junio de 2009

Frio y Condiciones De Enseñanza

Se viene el frío, al menos los pronósticos anticipan una caída de las temperaturas para mediados de la semana. Esta situación sumada a la infraestructura devaluada de las escuelas traerá seguramente mayores problemas a los planteados por las enfermedades invernales que charlábamos en otros post. En este sentido quiero tomar parte de lo que Jana expreso en su comentario.
Coincido en lo que plantea Jana y cuando el pronostico anuncio una ola polar comencé a pensar en las estufas que no andan, en los vidrios que no existen.
Pero no todo es pálida al menos en la escuela los chicos comen. A penas tuve ese pensamiento me puse a pensar en los menús escolares, aclaro que lo de menú no es sarcasmo no encontré otra forma respetuosa de llamarlo. Los chicos comen en la escuela, pero ¿que comen? En lineas generales las meriendas ( comida de media mañana o media tarde) están compuestas de panes y derivados acompañados de fiambres o en forma de facturas y alfajores. En lo que se refiere al almuerzo, en las escuelas donde existe el comedor propiamente dicho, los menús incluyen grasas y proteínas derivada de carnes, harinas y derivados, arroz y en mínimas cantidades verduras.
Como dos más dos es cuatro; harinas y grasas es sinónimo de una alimentación deficiente. Tal vez en esto encontremos la explicación sobre por qué los chicos se enferman. Una comida deficiente tanto en el hogar como en la escuela. Además podemos agregarle la variable climática y edilicia. Aquí quiero hacer un alto.
Me preocupo el tema de la ola polar y pase por la pagina del servicio meteorológico nacional para comprobar si estábamos en un pico de frió o en un invierno más frió de lo normal y me lleve una sorpresa. Leyendo el Boletín de precisión para el trimestre Junio- Agosto los meteorólogos marcan que la tendencia de temperaturas es entre normal o superior para la media de los últimos treinta año.
De esto se desprende que la cuestión climática influye pero no en el sentido que le estábamos dando. Tal vez podríamos relacionarla con otras enfermedades pero en cuanto a las inviernales no, o al menos no más de lo normal.
Lo que nos queda entonces es responsabilidad del Estado en lo que se refiere a tres puntos que influyen directamente en la calidad de nuestro trabajo: La alimentación de los chicos, el estado de los edificios escolares y en términos macro la política educativa y social en general.
Profundizando lo que Jana decía en su comentario, en estas condiciones la cantidad de horas,días o meses que un chico pasa en la escuela no influye directamente en la calidad de la enseñanza. Puesto que en situación de riesgo los contenidos pasan a un segundo plano y la escuela debe correrse de su rol para suplir otras responsabilidades que no le son propias.
El problema es que de tanto corrernos ya no sabemos bien quien somos ni para que estamos

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